
El PAN de la Ciudad de México lo dice claro: es urgente renovar y modernizar las unidades, equiparlas con botones de pánico, GPS y sistemas de seguridad reales, así como garantizar que los choferes trabajen con capacitación y mantenimiento adecuado.
Luisa Gutiérrez Ureña, presidenta del PAN CDMX, junto con el diputado federal del PAN, Federico Döring Casar, insistieron en su propuesta de un Comité Ciudadano que supervise y fiscalice el destino de ese incremento, de lo contrario no será creíble ni sucederá jamás la mejora en el servicio.
La panista dijo que cada que aumentan el transporte público en CDMX, prometen lo mismo: que vendrán mejoras al servicio. Pero no hay mejoras; las unidades siguen igual de viejas, de peligrosas e indignas. Y lo peor: el gobierno ya no puede echarle la culpa a nadie más.
“Porque el mismo grupo político ha gobernado la Ciudad de México durante 28 años. Veintiocho años prometiendo modernizar el transporte y lo único que ha cambiado son las tarifas”.
Luisa Gutiérrez señaló que e tema de renovar y modernizar las unidades con esquemas de alta seguridad para pasajeros y principalmente usuarios, no debe no debe salir del bolsillo de los capitalinos, sino del gobierno de la ciudad, que ya cobra suficientes impuestos.
“Para 2026, el cártel de Morena planea además un aumento de impuestos. Más impuestos, más tarifas, más cobros y los servicios, también, más caros”.
De $2.50 en 2003 a $7.50 en 2025. Un aumento del 200%. Y el servicio sigue igual. Durante la campaña, Clara Brugada, entonces candidata, dijo que un aumento al transporte sería injusto y que no lo permitiría.
Hoy, ya como jefa de Gobierno, hizo exactamente lo contrario. Y miles de capitalinos tendrán que pagar más por el mismo mal servicio.
En el PAN CDMX creemos que el dinero de los capitalinos debe invertirse en lo que importa: en seguridad, en transporte, en servicios públicos, no en propaganda para tapar la ineptitud del gobierno ni en proyectos fracaso.
El tesorero del PAN CDMX, Oscar Agüero Zúñiga, mencionó que, cuando el cártel de Morena, pedía el voto, decía que el aumento al transporte era una injusticia, que era un golpe al bolsillo de los que menos tienen.
“Pero a partir de ahora los viajes en combi, microbús y autobus te costarán hasta 9 pesos. Y si utilizas las rutas de noche, hasta 11 pesos. Justifican el aumento en que garantizarán “mejores condiciones de viaje” para los usuarios: cámaras de seguridad, botón de pánico, choferes con uniforme… cosas que deberían estar garantizadas aún antes del aumento”.
Pero de renovar unidades para que sean más seguras y contaminen menos, eso ni lo mencionaron.
La economía de los mexicanos no está para que el gobierno siga sangrando sus bolsillos: la canasta básica está por los cielos, el precio de la vivienda ni se diga, y ahora también el transporte. Y encima, vienen más impuestos para el próximo año.